
coronavirus 4.30.2020
La Diócesis de Dallas Anuncia un Plan de Reapertura Gradual
Dallas Diocese Announces Incremental Reopening Plan
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Español
La Diócesis de Dallas ha publicado un decreto que describe la manera en la que sus 77 iglesias serán gradualmente abiertas para recibir a los 1.3 millones de Católicos en los 9 condados a los que sirve. Tomando en cuenta las recientes guías de las autoridades civiles y sanitarias, y con el apoyo unánime del consejo de liderazgo sacerdotal del obispo, la Diócesis de Dallas iniciará el proceso de apertura en fases, permitiendo la capacidad de reevaluar el proceso según sea necesario para garantizar la salud y la seguridad de la comunidad. Este proceso se llevará a cabo en cuatro fases, con cada fase construyendo sobre la base de la última.
"La salud y seguridad de nuestros fieles, clérigos y nuestra comunidad, son nuestra máxima prioridad durante estos tiempos difíciles y desafiantes, y nuestro objetivo es seguir atendiendo el bienestar físico y espiritual de nuestros feligreses", expresó el Obispo Edward J. Burns. "Les pido a todos en la comunidad Católica que por favor reconozcan la necesidad de ser pacientes y prudentes durante estos tiempos difíciles, y que nos unamos en oración por todos los que han sido afectados por este virus".
La Fase Uno iniciará el proceso de apertura retomando las confesiones programadas y la Adoración Eucarística con estrictas pautas de distanciamiento social; la celebración de los Sacramentos de Iniciación (Bautismo, Confirmación y Eucaristía para quienes no pudieron ser recibidos en la Iglesia debido a la pandemia); y celebraciones religiosas para familias con directrices con asistencia limitada (Bodas, Ordenaciones, Misas de Exequias y Quinceañeras). La Fase Uno entró en vigor con la firma del decreto y estará vigente por lo menos hasta el 18 de mayo.
Se aplicarán requisitos específicos a todas las reuniones limitadas y a los edificios de la iglesia. Los grupos no pueden exceder el 25% de la capacidad total indicada para los edificios de la iglesia y todos los requisitos de distanciamiento social (seis pies de separación) deben seguirse estrictamente cuando las personas estén presentes en los edificios de la iglesia. Si una celebración o evento litúrgico no puede mantener la capacidad y los requisitos de distanciamiento social, no podrán realizarse. Asimismo, el decreto establece que todas las órdenes locales de seguridad, específicamente relacionadas con las cubiertas faciales adecuadas deben seguirse en los edificios de la iglesia. Todos los edificios de la iglesia también serán desinfectados diligentemente.
Las Misas Diarias y Dominicales permanecerán suspendidas temporalmente, pero serán reanudadas en futuras fases. Las escuelas diocesanas permanecerán cerradas, y el aprendizaje en línea continuará hasta nuevo aviso. Un decreto del Obispo Burns, proporcionando datos específicos, acompañará la Fase Uno y cada una de las fases futuras.
Vea la Declaración del Obispo Burns - 29 de abril de 2020
DECRETO
Introducción y Explicación
El 31 de marzo de 2020, emití un decreto que prorrogó la suspensión de las Misas hasta el 1º. de mayo, y proporcionó directrices adicionales para la Diócesis durante la pandemia del Coronavirus. El 27 de abril de 2020, el Gobernador de Texas emitió estándares para abrir negocios y otras instituciones en el Estado de Texas. En particular, el Gobernador proporcionó una serie de protocolos para la reanudación de los servicios religiosos, en los que hizo hincapié en la protección de las poblaciones en riesgo y la garantía de medidas de distanciamiento social adecuadas.
Como pastor de la Diócesis, y tomando en cuenta la guía de las autoridades civiles y sanitarias, me parece prudente iniciar el proceso de apertura en la Diócesis de Dallas en fases, manteniendo la capacidad de reevaluar el proceso según sea necesario para garantizar la salud y la seguridad de la comunidad. Este proceso probablemente ocurrirá en cuatro fases, con cada fase construyendo sobre la base de la última.
Las siguientes Fases representan objetivos amplios y están sujetas a cambios. Cada Fase irá acompañada de un decreto para brindar orientación específica. La Primera Fase comenzará en la fecha de promulgación de este Decreto. No hay fechas establecidas para las otras fases, aunque otro Decreto será promulgado antes del 18 de mayo de 2020.
- FASE UNO: Las Confesiones Programadas pueden reanudarse con estrictas pautas de distanciamiento social; la celebración de los Sacramentos de Iniciación (Bautismo, Confirmación y Eucaristía) para adultos y niños que se habían estado preparando para los sacramentos de Pascua pero que no han sido recibidos en la Iglesia debido a esta pandemia, así como para los infantes, puede continuar en un número limitado; y las celebraciones religiosas para familias (Bodas, Ordenaciones, Misas de Exequias, Quinceañeras, etc.) pueden comenzar en pequeños grupos.
- FASE DOS: La celebración de las Misas públicas diarias puede ser reanudada, con protocolos que garanticen una asistencia limitada y restringida de acuerdo con los protocolos de distanciamiento y seguridad presentados por y siguiendo las directrices de las autoridades civiles y sanitarias.
- FASE TRES: La celebración de las Misas Dominicales públicas puede ser reanudada, con asistencia limitada y restringida, la cual será incrementada con el tiempo, como es presentada por y siguiendo las directrices de las autoridades civiles y sanitarias. Incluso cuando haya una Misa Dominical disponible, los Fieles permanecerán dispensados de cualquier obligación de asistir a Misa el domingo debido a la continuación de la asistencia restringida.
- FASE CUATRO: La celebración de las Misas Dominicales a plena capacidad puede ser reanudada, con un regreso a un estado que se asemeje a la vida Católica antes del comienzo de la pandemia.
Fase Uno
Por lo tanto, en este momento, con el acuerdo unánime de los sacerdotes que supervisan cada Decanato de la Diócesis, y siguiendo las directrices locales de las autoridades civiles y sanitarias, y por el deseo de ayudar a combatir el virus, y limitar al rebaño de la exposición o el riesgo, consciente de que muchos acontecimientos pueden, por su naturaleza, atraer a un gran número de personas, presento este decreto.
Los siguientes requisitos se aplican a todas las reuniones limitadas y al propio edificio de la iglesia:
- Requisitos de Reunión y Acomodo: Los grupos no pueden exceder el 25% de la capacidad total indicada para los edificios de la iglesia y todos los requisitos de distanciamiento social (seis pies de separación) deben seguirse estrictamente cuando las personas están presentes en los edificios de la iglesia.
- Cuando los Fieles estén sentados en el edificio de la iglesia, los párrocos se asegurarán de que los Fieles mantengan por lo menos dos asientos vacíos (o separación de seis pies) entre participantes en cualquier línea, excepto cuando dos o más miembros del mismo hogar se sienten juntos, con dos asientos (o seis pies de separación) vacíos a cada lado. Los párrocos deben asegurarse que cada tercera banca permanezca vacía. Deben indicarse con señales claras cuales asientos están disponibles, y cuales están cerrados.
- Se recomienda encarecidamente que los presentes en un edificio de la iglesia lleven cubiertas faciales adecuadas, siguiendo las disposiciones civiles locales siempre que resulte adecuado.
- El edificio de la iglesia debe ser limpiado y desinfectado diligentemente. Los párrocos deben capacitar, o haber capacitado, a todos los empleados y voluntarios acerca de la limpieza y desinfección adecuadas, higiene de las manos y etiqueta respiratoria. Protocolos adicionales para esto estarán disponibles próximamente, pero la limpieza diligente debe ocurrir después de cada reunión o evento.
- Todos los protocolos de Ambiente Seguro Diocesano permanecen estrictamente vigentes.
Las siguientes son las reuniones limitadas que pueden tener lugar. Tome en cuenta que la discreción del párroco es primordial. El párroco es la mejor fuente para determinar la factibilidad de cualquier celebración o evento litúrgico en una parroquia. Si una celebración o evento litúrgico no puede mantener los Requisitos de Reunión y Acomodo indicados anteriormente, no podrán realizarse.
- Las Misas Dominicales y Diarias permanecen suspendidas durante esta fase. Las Misas y otras devociones seguirán siendo transmitidas en vivo. Además de las parroquias, la Diócesis continúa transmitiendo Misas en vivo y eventos grabados en el sitio web de la Diócesis de Dallas y la televisión local. Durante dichas Misas, se realizará un acto de comunión espiritual.
- Todos los Católicos de la Diócesis de Dallas siguen dispensados de la obligación de asistir a Misa “el domingo y las demás fiestas de precepto” (canon 1247). El requisito de recibir la comunión durante la temporada de Pascua (canon 920) puede cumplirse en otro momento del año.
- El Centro Pastoral actualmente se encuentra cerrado, con el objetivo de iniciar el proceso de apertura después del 18 de mayo de 2020. Los servicios sacramentales (incluida la labor del Tribunal) siguen funcionando.
- Las Oficinas Parroquiales pueden ser abiertas a discreción del párroco, quien debe asegurarse que los empleados y voluntarios cumplan con todas las directrices de seguridad y distanciamiento social como se describe en los protocolos diocesanos de reincorporación. Estos protocolos se proporcionarán a párrocos y gerentes de negocios.
- Las escuelas diocesanas permanecerán cerradas, y el aprendizaje en línea continuará hasta nuevo aviso.
- La Adoración Eucarística del Santísimo Sacramento está permitida a discreción del párroco. El edificio de la iglesia puede permanecer físicamente abierto para orar durante las horas del día a discreción del párroco. Los requisitos de Reunión y Acomodo antes mencionados siempre deben mantenerse.
- La celebración de los Sacramentos de Iniciación (Bautismos, Confirmaciones y Eucaristía) tanto para niños como adultos en el RICA, así como para infantes, puede reanudarse a discreción del párroco. Estos sacramentos pueden incluir la presencia de familias e invitados, siempre y cuando se mantengan los requisitos de Reunión y Acomodo.
- Las Ordenaciones se llevarán a cabo en la Diócesis con la presencia de familias e invitados, manteniendo los requisitos de Reunión y Acomodo anteriores. Esto incluye las ordenaciones al diaconado (transicional y permanente) y al sacerdocio.
- Las Bodas, incluyendo las Convalidaciones, pueden reanudarse con familias e invitados a discreción del párroco. Se deben mantener los requisitos de Reunión y Acomodo anteriores; el número total de presentes no podrá exceder del 25% de la capacidad total indicada para el edificio de la iglesia.
- Las Quinceañeras también puede reanudarse con la presencia de familiares e invitados a discreción del párroco bajo los requisitos de Reunión y Acomodo; el número total de individuos presentes no podrá exceder del 25% de la capacidad total indicada para el edificio de la iglesia.
- Los Servicios Funerarios, incluyendo Misas de Exequias, Vigilias y Visitas pueden reanudarse con familias e invitados. Deben mantenerse los requisitos de Reunión y Acomodo.
- Para cualquier celebración litúrgica que incluya la recepción de la Sagrada Comunión, deben cumplirse los siguientes requisitos:
- Los Fieles (especialmente los miembros de poblaciones vulnerables) que estén presentes en estas celebraciones litúrgicas pueden prescindir de la recepción de la Sagrada Comunión y realizar un acto de comunión espiritual en este momento
- Todos los vasos sagrados deben ser desinfectados antes de la celebración
- Sólo sacerdotes, diáconos y acólitos instalados pueden distribuir la Sagrada Comunión
- La distribución de la Sangre Preciosa permanece suspendida en este momento
- Los sacerdotes deben desinfectar sus manos antes de acercarse al altar antes de comenzar la Liturgia de la Eucaristía. Los diáconos y los acólitos instalados deben desinfectar sus manos antes de la distribución.
- Los sacerdotes, diáconos y acólitos instalados deben considerar utilizar cubiertas faciales durante la distribución de la Sagrada Comunión
- Se exhorta encarecidamente a quienes reciben la Sagrada Comunión que desinfecten sus manos antes de la recepción de la Sagrada Comunión y recibir la Sagrada Comunión de la mano
- Las Confesiones Programadas pueden reanudarse con un horario determinado por el párroco. El párroco debe asegurarse diligentemente que se mantenga el distanciamiento social y que los grupos grandes no se reúnan mientras esperan en la fila para la Confesión. Se exhorta que las confesiones tengan lugar en espacios abiertos, incluso fuera del edificio de la iglesia, aunque siempre proporcionando la opción de privacidad y anonimato.
- Contrición Perfecta: Incluso si la Confesión puede estar disponible en algún lugar de la Diócesis, no todos los Fieles se sentirán seguros al acercarse al sacramento en este momento. Por lo tanto, la Diócesis ha publicado un recurso sobre la Contrición Perfecta que debería ser útil para los Fieles que no pueden acudir al Sacramento de la Confesión. Este recurso se encuentra aquí. La Contrición Perfecta "obtiene inmediatamente perdón de los pecados mortales si incluye la firme resolución de recurrir a la confesión sacramental tan pronto como sea posible".
- Todas las demás reuniones parroquiales deben permanecer canceladas en este momento.
- La Comunión como Viático, la Unción de los Enfermos y la Confesión deben ser otorgadas en peligro de muerte en la medida de lo posible. En caso de que se indique COVID-19, póngase en contacto con el número de emergencia (469-401-7717).
Este Decreto permanecerá en vigor hasta el 18 de mayo de 2020, a menos que sea modificado o revocado.
"Nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios. Más aún, nos gloriamos hasta de las mismas tribulaciones, porque sabemos que la tribulación produce la constancia; la constancia, la virtud probada; la virtud probada, la esperanza. Y la esperanza no quedará defraudada, porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo, que nos ha sido dado".
– Romanos 5,2-5
Dado el 29 de abril de 2020 en la Diócesis de Dallas, Memorial de Santa Catalina de Siena.
Excelentísimo Edward J. Burns
Obispo de DallasGregory Caridi
Canciller -
English
The Diocese of Dallas has released a decree outlining the way in which its 77 churches will incrementally open to welcome back the 1.3 million Catholics in the 9 counties it serves. Taking into consideration the recent guidance of civil and health authorities, and with the unanimous support of the bishop’s priest leadership council, the Diocese of Dallas will begin the process of opening in phases, allowing for the ability to re-evaluate the process as necessary in order to ensure the health and safety of the community. This process will occur in four phases, with each phase building upon the last.
“The health and safety of our faithful, clergy and our community are our utmost priorities during this difficult time, and it is our goal to continue attending to the physical and spiritual welfare of our parishioners,” said Bishop Edward J. Burns. “I ask all in the Catholic community to please recognize the need for patience and prudence during this challenging time, and that we join in prayer for all those who are affected by this virus.”
Phase One will begin the opening process by resuming scheduled confessions and Eucharistic Adoration with strict social distancing guidelines; the celebration of the Sacraments of Initiation (Baptism, Confirmation and Eucharist for those who were unable to be brought into the Church due to the pandemic); and religious celebrations for families with guidelines that limit attendance (Weddings, Ordinations, Funeral Masses and Quinceañeras). Phase One became effective with the signing of the decree and will be in effect until at least May 18.
Specific requirements will apply to all limited gatherings and to the church buildings. Groups may not exceed 25% of total listed capacity for church buildings and all social distancing requirements (six feet of separation) must be strictly followed when individuals are present in church buildings. If a liturgical celebration or event cannot maintain the capacity and social distancing requirements, it may not take place. The decree also states that all local safety orders specifically relating to proper face coverings should be followed in church buildings. All church buildings will also be diligently disinfected.
Daily and Sunday Masses will remain temporarily suspended but will resume in future phases. Diocesan schools will remain closed, and e-learning is to continue until further notice. A decree from Bishop Burns will accompany Phase One and each of the future phases and provide specific details.
View April 29th Decree from Bishop Burns
DECREE
Introduction and Explanation
On March 31, 2020, I issued a decree which extended until May 1 the suspension of Masses as well as provided additional guidelines for the Diocese during the Coronavirus pandemic. On April 27, 2020, the Governor of Texas issued standards for opening businesses and other institutions in the State of Texas. In particular, the Governor provided a number of protocols for resuming religious services, which emphasized protecting at-risk populations and ensuring proper social distancing measures.
As shepherd of the Diocese, and taking into consideration the guidance of civil and health authorities, I find it prudent to begin the process of opening the Diocese of Dallas in phases, maintaining the ability to re-evaluate the process as necessary in order to ensure the health and safety of the community. This process will likely occur in four phases, with each phase building on the last.
The following Phases represent broad goals and are subject to change. A decree will accompany each Phase to provide specific guidance. Phase One will begin at the date of promulgation of this Decree. There are no set dates for the other phases, although another Decree will be promulgated by May 18, 2020.
- PHASE ONE: Scheduled Confessions may resume with strict social distancing guidelines; the celebration of the Sacraments of Initiation (Baptism, Confirmation and Eucharist) for adults and children who had been preparing for the Easter sacraments but have gone without reception into the Church due to this pandemic as well as for infants can continue in limited numbers; and religious celebrations for families (weddings, Ordinations, Funeral Masses, Quinceañeras, etc.) may begin in small groups.
- PHASE TWO: The celebration of public daily Masses may resume, with protocols to ensure limited and restricted attendance in keeping with distancing and safety protocols as presented by and following civil and health authorities.
- PHASE THREE: The celebration of public Sunday Masses may resume, with limited and restricted attendance increasing over time, as presented by and following civil and health authorities. Even when Sunday Mass is available, the Faithful will remain dispensed from any obligation to attend Mass on Sunday because of the continuation of restricted attendance.
- PHASE FOUR: The celebration of Sunday Masses at full capacity may resume, with a return to a state resembling Catholic life before the beginning of the pandemic.
Phase One
Therefore, at this time, with unanimous agreement of the priests who oversee each Deanery in the Diocese and following local civil and health authorities’ guidelines, and out of a desire to help combat the virus and limit the flock from exposure or risk, aware that many events can by their nature attract large numbers of people, I hereby present this decree.
The following requirements apply to all limited gatherings and to the church building itself:
- Gathering and Seating Requirements: Groups may not exceed 25% of total listed capacity for church buildings and all social distancing requirements (six feet of separation) must be strictly followed when individuals are present in church buildings.
- When the Faithful are seated in the church building, pastors will ensure that the Faithful keep at least two empty seats (or six feet separation) between parties in any row, except when two or more members of the same household sit adjacent to one another, with two seats (or six feet of separation) empty on either side. Pastors must ensure that every other row is left empty. Which seats are available and which are closed will need to be indicated with clear signs.
- It is strongly encouraged that those present in a church building wear proper face coverings, following local civil orders where appropriate
- The church building must be diligently cleaned and disinfected. Pastors must train or have trained all employees, volunteers on appropriate cleaning and disinfection, hand hygiene, and respiratory etiquette. Additional protocols for this are forthcoming, but diligent cleaning must occur after every gathering or event.
- All Diocesan Safe Environment protocols remain strictly in place.
The following are the limited gatherings that may take place. Note that the discretion of the pastor is paramount. The pastor is the best source for determining the practicability of any liturgical celebration or event at a parish. If a liturgical celebration or event cannot maintain the Gathering and Seating Requirements stated above, it may not take place.
- Sunday and Daily Masses remain suspended during this phase. Masses and other devotions will continue to be livestreamed. In addition to parishes, the Diocese continues to broadcast live masses and recorded events on the Diocese of Dallas website and local television. During such Masses, there will be an act of spiritual communion.
- All Catholics of the Diocese of Dallas remain dispensed from the obligation to attend Mass “on Sundays and other holy days of Obligation” (canon 1247). The requirement to receive communion during the Easter season (canon 920) may be fulfilled at another time during the year.
- The Pastoral Center is currently closed, with the goal of beginning the process of opening after May 18, 2020. Sacramental services (including the work of the Tribunal) remain functioning.
- Parish Offices may be opened at the discretion of the pastor, who is to make sure that all safety and social distancing guidelines are met for employees and volunteers as described in the diocesan re-entry protocols. These protocols will be provided to pastors and business managers.
- Diocesan schools will remain closed, and e-learning is to continue until further notice.
- Eucharistic Adoration of the Blessed Sacrament is permitted at the discretion of the pastor. The church building may remain physically open at times during the daytime hours for prayer at the discretion of the pastor. The aforementioned Gathering and Seating Requirements must always be maintained.
- The celebration of the Sacraments of Initiation (Baptisms, Confirmations and Eucharist) for both children and adults in the RCIA as well as for infants may resume at the discretion of the pastor. These sacraments may include the presence of families and guests, so long as the Gathering and Seating Requirements are maintained.
- Ordinations will take place in the Diocese with the presence of families and guests, maintaining the above Gathering and Seating Requirements. This includes ordinations to the diaconate (transitional and permanent) and the priesthood.
- Weddings, including Convalidations, may resume with families and guests at the discretion of the pastor. The above Gathering and Seating Requirements must be maintained; the total number present may not exceed 25% of the total listed capacity for the church building.
- Quinceañeras may also resume with the presence of families and guests at the discretion of the pastor under the Gathering and Seating Requirements; the total number present may not exceed 25% of the total listed capacity for the church building.
- Funeral services, including Funeral Masses, Wakes and Viewings may resume with families and guests. The Gathering and Seating Requirements must be maintained.
- For any liturgical celebration that includes reception of Holy Communion, the following requirements must be met:
- The Faithful (especially members of vulnerable populations) who are present at these liturgical celebrations are free to forego reception of Holy Communion at this time and make an act of spiritual communion
- All vessels must be sanitized before celebration
- Only priests, deacons and installed acolytes may distribute Holy Communion
- Distribution of the Precious Blood remains suspended at this time
- Priests should sanitize their hands before approaching the altar prior to the beginning of the Liturgy of the Eucharist. Deacons and installed acolytes should sanitize their hands before distribution
- Priests, deacons and installed acolytes should consider wearing face coverings during distribution of Holy Communion
- Those receiving Holy Communion are strongly encouraged to sanitize their hands before reception of Holy Communion and to receive Holy Communion on the hand
- Scheduled Confessions may resume with a schedule determined by the pastor. The pastor must diligently ensure that social distancing is maintained and that large groups do not gather while waiting in line for Confession. Confessions are encouraged to take place in open spaces, even outside the church building, while always providing the option for privacy and anonymity.
- Perfect Contrition: Even if Confession may be available in a location in the Diocese, not all of the Faithful will feel safe in approaching the sacrament at this time. Therefore, the Diocese has published a resource on Perfect Contrition that should be helpful to the Faithful who are unable to seek the Sacrament of Confession. It is located here. Perfect Contrition “obtains forgiveness of mortal sins if it includes the firm resolution to have recourse to Sacramental Confession as soon as possible.”
- All other parish gatherings are to remain cancelled at this time.
- Communion as Viaticum, Anointing of the Sick and Confession are to be given in danger of death where possible. In the event where COVID-19 is indicated, please contact the emergency number (469-401-7717).
This Decree remains in effect until May 18, 2020 unless it is modified or revoked.
“[W]e rejoice in our hope of sharing the glory of God. More than that, we rejoice in our sufferings, knowing that suffering produces endurance, and endurance produces character, and character produces hope, and hope does not disappoint us, because God’s love has been poured into our hearts through the Holy Spirit who has been given to us.” – Romans 5:3-5.
Given on April 29, 2020 in the Diocese of Dallas, the Memorial of Saint Catherine of Siena.
Most Reverend Edward J. Burns
Bishop of DallasGregory Caridi
Chancellor